Ubicada en La Libertad, El Salvador, la familia Rodezno ha estado profundamente arraigada en la industria del café desde mediados del siglo XIX. Si bien mi capítulo en esta historia comenzó hace apenas unos años, la pasión de nuestra familia por el café de calidad se extiende por generaciones.

GODO, nombre inspirado en mi abuelo, Godofredo, rinde homenaje a su dedicación de toda la vida al café. Durante 53 años, dominó cada etapa del este arte, desde el cultivo y la comercialización hasta el tostado y la venta al por mayor. Se aseguró de que nuestra familia siempre tuviera el mejor café que nuestra finca podía producir: mezclas excepcionales y granos tostados a la perfección. Mi misión es compartir este legado con el mayor número de personas posible, llevando su compromiso con la calidad desde nuestra finca hasta su mesa.

Sumérgete en la calidez de nuestra tradición familiar con cada sorbo. Elaborado para realzar momentos inolvidables, nuestro café encarna no solo la esencia de nuestras reuniones, sino también la excepcional calidad que nos enorgullece compartir con el mundo.